Share This Article
El Halloween 2025 en el Área Metropolitana de Guadalajara dejó un mensaje contundente: “no hay espacio para las rodadas del terror”. Con un operativo quirúrgico que combinó inteligencia policial, fuerza pública y vigilancia en tierra, autoridades estatales desmontaron los intentos de grupos de motociclistas de tomar las calles.
El despliegue arrancó a las 18:00 horas del 31 de octubre y concluyó a las 2:00 de la madrugada del 1 de noviembre, dejando como saldo 123 motocicletas aseguradas, junto a un Razer y una cuatrimoto.
Pero el dato que encendió las alarmas ocurrió en Arcos de Zapopan: dos menores, que circulaban en motocicleta, fueron detenidos por presuntamente portar un arma de fuego, droga y disparar contra policías del Escuadrón Motorizado Jaguares. El hecho tuvo lugar en el cruce de Juan Gil Preciado y Arco del Triunfo.
En el mismo dispositivo se incautó un arma calibre .22, tres cartuchos útiles, 13 gramos de crystal y un picahielos. Además, 22 personas más, dos de ellas mujeres, quedaron detenidas por faltas administrativas, principalmente por alterar el orden.
Las células operativas recorrieron zonas identificadas como focos de riesgo, como Moderna, Americana, Vallarta Norte, Chapalita, Villas de Oriente, Lomas de la Soledad y nuevamente Arcos de Zapopan, históricamente utilizadas para las rodadas clandestinas.
Detrás del operativo, casi 600 elementos de la Policía Estatal Preventiva, Policía Vial, Policía Metropolitana, SEDENA y Guardia Nacional, divididos en cinco rutas, interceptaron a grupos de motociclistas antes de que lograran consolidar caravanas.
El Gobierno estatal apostó por presencia visible y reacción inmediata para desactivar reuniones masivas y posibles incidentes vinculados a vandalismo, como ha ocurrido en años anteriores.
Calles sin estampidas de motos, patrullas en puntos críticos y cero tolerancia marcaron una noche que, aunque festiva, también fue vigilada centímetro a centímetro.
